Las bodegas argentinas han encontrado en Brasil un mercado lleno de oportunidades para expandir sus exportaciones de vino. Entre el 1 y el 3 de octubre, un total de 67 empresas participarán en ProWine San Pablo, uno de los eventos más importantes del sector vitivinícola en América Latina. Este evento será una plataforma clave para demostrar la calidad y diversidad del vino argentino, y así conquistar a más consumidores brasileños.
Brasil ya se ha establecido como el segundo destino en importancia para los vinos argentinos, solo por detrás de Estados Unidos. Este mercado ha mostrado un crecimiento constante en los últimos años, lo que ha despertado un interés renovado en los productores de vino de Argentina. Las bodegas buscan no solo consolidar su presencia, sino también incrementar su participación en un mercado que tiene un potencial enorme debido a su población y su creciente interés por vinos de calidad.
Según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en 2022, las exportaciones de vino argentino a Brasil crecieron un 15%, alcanzando un volumen de 45 millones de litros. Entre los productos más exportados se encuentran los vinos tintos y espumantes, que han logrado captar la atención del consumidor brasileño debido a su calidad superior y la variedad de sabores que ofrecen. Representantes de las bodegas participantes esperan que la edición de este año de ProWine San Pablo no solo consolide estas cifras, sino que también abra nuevas oportunidades comerciales.
La participación en ProWine San Pablo no solo busca impulsar las ventas, sino también generar alianzas estratégicas con distribuidores y sommeliers locales, conocer las tendencias del mercado brasileño y adaptar sus productos a las demandas específicas de este público. “Nuestra expectativa es muy alta. Brasil es un mercado vibrante y con un enorme potencial. Queremos establecer relaciones a largo plazo que beneficien tanto a las bodegas argentinas como a los consumidores brasileños”, señaló Juan Carlos Paredes, director de una reconocida bodega en Mendoza.
En el contexto actual, donde las relaciones comerciales y los acuerdos internacionales son más cruciales que nunca, la posición de Brasil como mercado prioritario para el vino argentino sugiere una estrategia bien definida y una apuesta por la colaboración regional. Esta iniciativa no solo fortalecerá la industria vitivinícola argentina, sino que también profundizará los lazos culturales y comerciales entre ambos países.